Oscuridad.-

La oscuridad se convirtió en mi amiga, los mejores recuerdos que tengo ahí aguardan. Ya no veo las sombras como algo que afrontar, se combinaron en los pedazos faltantes de mi alma, me pertenecen, estar a oscuras es lo que más me gusta, estar bajo la ducha, caminar por toda la casa, tocar el piano, estar en la cama, no se como ni porque, pero lo que me faltaría seria encontrarte a ciegas en mi habitación, como pude hacer ¿Debería secuestrarte dormida? Alguien una vez lo hizo conmigo en sueños.

Las dudas oxidan mi cabeza, son como cuervos que me atacan, esperando a tener la guardia baja para consumir lo que queda, puedo llegar a la cima del mundo, ver la ciudad y su horizonte, lo hice y no estabas ahí, aunque a las estrellas no le importaron, a mi si.

La noche era perfecta, la ciudad expectante, una suave música sonaba y yo ahí, solo, mirando la periferia, ¿Dónde estas?. ¿Si me tiro al vació desde el décimo piso volverás?, Nunca quise matarte, no tengo las manos manchadas de sangre, o al menos si así fuera, no soy el único.

Sera parte de mi imaginación, pero la oscuridad es lo único que me queda, en ella puedo verme, aceptarme, entenderme, perderme, ¿Quererme?. Sentirme a salvo serian las palabras adecuadas, ya que al salir el sol, al mostrarme la "realidad" me siento en un laberinto gigante, las paredes se abren y cierran frente a mis ojos, dejándome solo mientras las murallas se elevan como si trataran de encerrar un monstruo.

Todo es mi parte de mi propio mundo, creado por una mente retorcida, peor que el país de las maravillas. Caí y caí, nunca llegue al suelo ni encontré al conejo, estoy colgando desde un borde limitándome a observar la vista, viendo como lo que queda de mi mundo se consume.

No te culpo ni me culpo, quizás es otra prueba más. quizás las cosas puedan cambiar, es una decisión propia nada más, no puedo ser tu príncipe azul y rescatarte, soy todo menos eso. más aun que tengo el corazón partido en mil pedazos, me consume el fuego y el hielo, las certezas y las dudas, pero llegue a la conclusión que podes ser mi luz y oscuridad, esa dualidad faltante que haría que el cielo y las mismísimas montañas se hicieran trizas. ¿Volverás? no lo se,pero la vida sigue y voy a seguir, expectante como la ciudad aquella noche en la vereda, donde no podíamos ni siquiera conseguir un taxi. ¿Te encontrare? no lo se, pero lo único que te pido es que si el destino te pone en mi camino, me veas a mis ojos y me digas que ves. sin mascaras, mentiras o hipocresías, que te pares frente a mi, me tomes de las manos y observes.

No se como ni porque, pero tengo la certeza de lo que vas a ver.